NOVENO ENCUENTRO: María cuida a Jesús en su infancia
¡Alégrate! Virgen María, aleluya – Porque el Señor ha hecho en ti maravillas, aleluya.
“El Niño crecía y se fortalecía lleno de sabiduría, y la gracia de Dios estaba con Él. Cuantos le veían se maravillaban de su inteligencia y de sus palabras. Jesús crecía en sabiduría, en edad y en gracia ante Dios y ante los hombres” (Lc 2, 40.47.52)
REFLEXIÓN:
Los evangelios no cuentan la historia completa de Jesús. Los dos primeros capítulos de San Mateo y San Lucas, llamados Evangelios de la infancia, narran los hechos que consideraron más importantes. En cuanto al resto, San Lucas añade que Jesús crecía en sabiduría, en edad y en gracia ante Dios y ante los hombres.
Dios se ha hecho hombre y, como todos los demás seres humanos, está sujeto al desarrollo físico e intelectual. Jesús fue un bebé, un niño, un adolescente y un hombre adulto.
Durante treinta años de su vida Jesús pasó desapercibido para sus paisanos, recibiendo los cuidados, las atenciones y el amor de sus padres. Podemos suponer el respeto y el profundo amor con que María cuidaba de Él.
AVE MARÍA
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.